La catequesis ha sido siempre considerada por la Iglesia como una de sus tareas primordiales, ya que Cristo resucitado, antes de volver al Padre, dio a los Apóstoles esta última consigna: hacer discípulos a todas las gentes, enseñándoles a observar todo lo que Él había mandado[1]. Él les confiaba de este modo la misión y el poder de anunciar a los hombres lo que ellos mismos habían oído, visto con sus ojos, contemplado y palpado con sus manos, acerca del Verbo de vida[2].
Autor
Juan Pablo II
Editorial
Editorial vaticana
Fecha de publicación original
1978
Número de edición
No tiene
Tipo del contenido
Libro electrónico
Formato del contenido:
PDF
