La Imitación de Cristo, después de la Biblia, es uno de los libros más leídos por cristianos y seguidores de otros caminos espirituales. Para los lectores del siglo XXI es una obra totalmente singular, pues data de finales del siglo XIV y se inscribe en la corriente espiritual llamada Devotio moderna ampliamente difundida entre laicos y personas letradas de la época, que mantuvo gran influencia en la piedad cristiana posterior.Aunque la forma de interpretar el mundo de dicha corriente es ineludiblemente dualista y reduccionista, Tomás de Kempis poseía una mente libre, que no se dejó influenciar por ninguna corriente mística en particular. Para él lo importante era la experiencia espiritual del encuentro con Cristo y el desapego de uno mismo, que tanto llamó la atención de psicólogos como Sigmung Freud y C. G. Yung, e incluso del filósofo Martin Heidegger.Pero hoy, de acuerdo con las escrituras y con la fe cristiana reconocida a partir del Vaticano II, la teología actual ya no separa sino que articula las realidades que Tomas de Kempis contrata de modo tan radical. En esta línea, el teólogo Leonardo Boff retradujo y actualizó la obra añadiéndole un quinto libro bajo el título El seguimiento de Jesús, que traduce la tendencia espiritual vivida hoy por los cristianos comprometidos en el mundo para hacer valer los bienes del Reino de Dios que son el amor incondicional, la misericordia y la fraternidad universal tomando como punto de partida a los más humildes, y articulando la imitación con el seguimiento.
La dimensión del corazón fue descuidada por la modernidad la razón analítica, la razón instrumental y la tecnociencia buscaban, como método, el distanciamiento mas radical posible entre la emoción y la razón, y entre el sujeto pensante y el objeto pensado. Todo lo que tuviera relación con el mundo de las emociones, de los afectos, de la sensibilidad, en una palabra, del pathos, oscurecería la mirada analítica y “objetiva” sobre el objeto. Así pues, debía ponerse bajo sospecha, controlarse e incluso ser reprimido. En la actualidad, el gran desafío radica en dotar de centralidad a lo que hay de más ancestral en nosotros: el afecto y la sensibilidad, cuya mayor expresión se encuentra en el corazón. Para decirlo con claridad, lo que importa es rescatar al corazón y sus derechos, tan validos como los derechos de la razón, de la voluntad, de la inteligencia y de lo libido. El objetivo de nuestro texto es invitar a las personas a que aprendan a sentir y a unir la razón, generalmente fría y calculadora, con el afecto, cálido e irradiador. De esta amalgama nacerá, casi espontáneamente, nuestro deseo de cuidar todo lo que está vivo y es frágil e importante para la vida humana y la existencia en el planeta Tierra. El corazón posee sus propios derechos y su propia lógica. No ve tan claro como la razón, pero su mirada es más profunda y certera. Conocemos mejor cuando amamos. Y amamos más intensamente cuando nuestro conocimiento es más lúcido y menos prejuiciado.
Hoy existe una percepción generalizada de que sobre el sistema tierra y el sistema Vida, incluida la especie humana, pesan graves amenazas originadas por la irresponsable actividad humana a punto de destruir el frágil equilibrio del planeta. prácticamente la mayoría de los elementos importantes para la vida (el aire, el agua, el suelo, la biodiversidad, los bosques, la energía, etc)se encuentran en un proceso acelerado de degradación. La economía, la política, la cultura y la globalización siguen un derrotero que no puede ser considerado sostenible, debido a los niveles de explotación de los recursos naturales, así como de generación de desigualdades y conflictos, con los consiguientes desgarros sociales que producen. Frente a la crisis socio ambiental generalizada, la sostenibilidad constituye una cuestión de vida o muerte. Es preciso devolver el equilibrio a la tierra y a los ecosistemas para que la casa común pueda seguir siendo habitable y para que podamos salvar la vida humana y nuestra civilización. En esta obra el autor realiza un recorrido histórico desde el siglo XVI hasta nuestros días, sometiendo a rigurosa critica los distintos modelos existentes de desarrollo sostenible. Y apartir de una visión sistemática fundada en la nueva cosmología, en las ciencias de la vida, y de la tierra, presenta un concepto de sostenibilidad integral, aplicable al universo, a la tierra, a la comunidad de vida, a la sociedad, al desarrollo a la educación y a la vida de cada persona. La vitalidad de la Tierra y el futuro de la especie humana solo estarán garantizados si conseguimos dotarlos de sostenibilidad.
A los 50 años después de celebrar la Segunda Conferencia Episcopal Latinoamericana, por toda América Latina y Caribe, grupos católicos y evangélicos organizan eventos y reflexionan sobre la herencia dejada por Medellín. El objetivo es retomar el espíritu de apertura que se respiró en Medellín y ver cómo podemos hoy, actualizar esa profecía al servicio del mundo y de las iglesias. Sin duda, una característica actual de la realidad es el Pluralismo cultural y religioso, y uno de los mayores desafíos es el Diálogo entre las culturas y la colaboración entre las religiones.
Con motivo del 50 aniversario de la Segunda Conferencia Episcopal Latinoamericana se invita a vivir la actual hora de nuestro continente como un llamado del Espíritu para construir Pueblo de Dios a partir de la diversidad.
Con motivo del 50 aniversario de la Segunda Conferencia Episcopal se invita a reflexionar y dialogar sobre la importancia que tienen los Medios de Comunicación Social en nuestra sociedad y su influencia positiva o negativa que nos ayudan o manipulan, entretienen o informan en nuestro desarrollo personal y colectivo. Para hacer conciencia del buen y mal uso que hacemos de estos medios y de que somos portadores de un mensaje imperecedero de libertad, justicia, paz y solidaridad para la humanidad entera.
Con motivo de la celebración del 50 aniversario de la Segunda Conferencia Episcopal Latinoamericana se invita a reflexionar sobre el llamado de comunión que hace el Documento de Medellín entre los diversos ministerios que conforman la comunidad eclesial: (colegio episcopal o presbiterio, respectivamente) desde la revisión y planificación de estructuras, para que lleve a todo hombre y a todos los hombres a la plena comunión de vida con Dios y a hacer con otros, procesos de integración y liberación.
Con motivo de la celebración del 50 aniversario de la Segunda Conferencia Episcopal Latinoamericana, dialogar y reflexionar sobre la verdadera identidad de la Iglesia en América Latina, es decir, su opción por los pobres. Para hacer memoria de que Cristo nuestro Salvador, no sólo amó a los pobres, sino que "siendo rico se hizo pobre", vivió en la pobreza, centró su misión en el anuncio a los pobres de su liberación y fundó su Iglesia como signo de esa pobreza entre los hombres. Dando un público testimonio con gestos y actitudes que la hagan un signo más lúcido y auténtico de su Señor.
Con motivo del 50 aniversario de la Segunda Conferencia Epsicopal Latinoamericana se invita a reflexionar y dialogar sobre la importancia de la formación que reciben las y los religiosos, las y los consagrados y, de manera especial quienes, con una respuesta auténtica a su vocación, han decidido formarse para ser testigos del Amor y de la Misericordia de Dios a través del Ministerio Sacerdotal.
Es un tema a reflexionar y dialogar sobre el ser y hacer del religioso en la Iglesia latinoamericana, para conocer y comprender mejor su consagración. Y desde nuestra consagración bautismal trabajar en la construcción del Reino de Dios, por amor, identificándonos con Cristo en el misterio de su Encarnación, Muerte y Resurrección. con motivo de celebrar el 50 aniversario de la Segunda Conferencia Episcopal Latinoamericana.
Es artículo invita a la reflexión con motivo del cincuenta aniversario de la II Conferencia General del Episcopado Latinoamericano, celebrada en la ciudad colombiana de Medellín del 26 de agosto al 6 de septiembre de 1968, que cambió el rumbo de la Iglesia de América Latina orientándola por el camino de la liberación. Ejerció una influencia extraordinaria más allá del continente latinoamericano en otras Iglesias: de Europa, Estados Unidos y especialmente en el (entonces llamado) Tercer Mundo. Tuvo importantes repercusiones en los procesos de liberación que estaban produciéndose en el continente, en el pensamiento político latinoamericano y en los movimientos sociales.
Este libro cuenta de forma descriptiva la historia de Medellín 1968 desde el punto de vista de la protesta social, la secularización y la vida urbana, en un periodo de conflicto, protestas y violencia a nivel mundial. La parte nuclear del texto se refiere a un corto periodo entre enero de 1968 y noviembre de 1969. El primer apartado estudia la noción de residencia como práctica misional en América Latina y traza la genealogía de los movimientos sacerdotales radicales en los barrios populares de las ciudades. El segundo describe el contexto de la Iglesia en Medellín, la construcción del hábitat popular en el nororiente de la ciudad y la apuesta de algunos sacerdotes por trabajar entre los pobres urbanos. El tercero analiza tres componentes en el proceso de secularización social, a saber, la emergencia de la juventud, la autonomía creativa y la independencia de los sindicatos. El cuarto interpreta la visita del Papa como un escenario de conflicto por la imagen de Colombia ante el mundo. El quinto reconstruye las actividades de la II Conferencia General del Episcopado Latinoamericano. El sexto y el séptimo muestran de forma pormenorizada las actividades de sacerdotes, pobladores, estudiantes y sindicalistas durante las jornadas de agosto y septiembre de 1968. El octavo apartado apunta a examinar la proyección de Medellín entre un grupo radical de sacerdotes que se denominó Golconda. La conclusión presenta una síntesis del texto y un esbozo de interpretación historiográfica sobre el significado de Medellín.
La consagración sacerdotal del orden sitúa al sacerdote en el mundo para el servicio de la humanidad.