La comunidad cristiana está llamada a confesar permanentemente su fe. En verdad, fue así entre el pueblo de Israel, de cuyo seno nació la comunidad cristiana. En el Primer Testamento, más conocido en el mundo cristiano como “Antiguo Testamento”, encontramos numerosas formulaciones que atestiguan los grandes hechos de Dios en favor de su pueblo. Por ejemplo, es clásica la confesión de fe constante en Deuteronomio 26.5-11, en especial el
v. 9: “El Señor nos sacó de la tierra de Egipto con mano poderosa (...)”. En el Nuevo Testamento encontramos que, con la pregunta “pero vosotros (...) quien decís que soy yo?”, el propio Jesús suscita en sus discípulos, comenzando por Pedro, la confesión lapidaria: “Tu eres el Cristo, el hijo de Dios vivo” (Mateo 16.15-16).
Podemos concluir, de ambos ejemplos, que la confesión de fe es mucho más que la recitación de una doctrina. Es la afirmación personal y comunitaria de una convicción que da base, sentido y sustento a la propia vida. A partir de ella se vive; por ella, inlcusive, se puede dar la propia vida, de lo cual la Historia registra muchos ejemplos.
A pesar de que la confesión de fe ha de ser siempre algo muy personal, también es, esencialmente, una elaboración comunitaria, producto de una comunión entre la fe y la esperanza. La Iglesia, siempre de nuevo, confiesa la fe que la sustenta, sin la cual no tiene razón de ser. La confesión de fe más conocida, por lo menos en la cristiandad occidental, es el llamado Credo Apostólico.
Confesado una y otra vez en los cultos de muchas iglesias, junto “con toda la cristiandad en la tierra”, él resume el todo de la fe cristiana. Aún así, en todos los tiempos debe ser interpretado por la teología. En momentos decisivos de la historia también fue actualizado, traducido y reafirmado por la propia comunidad cristiana dentro de nuevos contextos y nuevos tiempos.
De esto es lo que trata el presente libro. Trata de la historia, del significado, del contenido y de la relevancia del Credo Apostólico. Interpreta cada una de sus partes y consigna ejemplos de formulaciones contemporáneas de “nuevos” credos. De esta forma, fortalece el conocimiento acerca de la fe cristiana y anima a vivir a partir de ella.
Esta obra es fruto de un trabajo colectivo.